La temporada de carreras de 2025 ni siquiera ha comenzado, pero George Russell ya podría ser el primero en algo. Es muy probable que sea él a quien la FIA dé ejemplo con su nueva normativa sobre insultos.
El piloto de Mercedes se deslizó durante el primer día de pruebas en Bahréin, donde mencionó al servicio de streaming Viaplay sobre el corte de energía que interrumpió el día, diciendo: "Oh, mierda, las luces se apagaron".
Con esto, ya se encontraba en el punto de mira del nuevo reglamento, que examina si causó daño moral a la FIA, su reputación, sus miembros, sus directivos y, en general, al automovilismo. ¡Menuda broma! Si la acusación es cierta, este pequeño desliz de Russell le costará 40.000 euros. Si vuelve a maldecir, la multa podría ascender a 120.000 euros, seguidos de la deducción de puntos y posiblemente una suspensión de un mes. En base a esto, Yuki Tsunoda y Max Verstappen podrían no tener que empezar la temporada 2025...
Foto: F1