Parece que la reunión celebrada con la participación de los líderes del equipo no es lo que parece. Así pues, el regreso de los motores V10 es solo una fachada, mientras que la atención se centra en la extinción de incendios en segundo plano...
Todo esto fue insinuado por Mark Hughes, el veterano periodista de F1, quien describió con precisión lo que quería decir. Según Hughes, la urgencia de la reunión del fin de semana surgió debido a las diferencias que se han generado entre los fabricantes durante el desarrollo de la fórmula del motor de 2026, lo que podría llevar a la serie a una espiral descendente, haciendo que las carreras sean potencialmente triviales.
Supuestamente, uno de los cinco fabricantes de motores se encuentra en una posición excepcional (Hughes afirma que se trata de Mercedes), otro se encuentra en una zona gris, es decir, no se sabe nada al respecto, el tercero no será competitivo con el combustible que ha elegido, mientras que los otros dos proveedores se encuentran en un nivel extremadamente rudimentario. Además, el problema se agrava aún más por el hecho de que la mayoría de los elementos ya desarrollados de los motores, así como los combustibles que se utilizarán a partir de 2026, ya han sido homologados, lo que congela el pedido actual de sistemas de propulsión. Y ni siquiera hemos mencionado la crisis económica mundial que afecta a todo, incluido este proceso. Les gustaría encontrar una solución a esto... En principio, levantar la homologación podría representar una oportunidad, y aún podría haber margen para ajustar el equilibrio de la producción energética del motor de combustión interna/eléctrico. Pero si esto aportará una solución o será suficiente para la calma antes de la tormenta...
Foto: F1