Todo el mundo recuerda el "interludio" que interrumpió la primera salida del Gran Premio de Australia, el accidente de Isaac Hadjar, la desesperación del joven piloto y el consuelo de Anthony Hamilton.
También recuerdan que Helmut Marko calificó directamente el comportamiento de Hadjar de "vergonzoso", además de poco viril e indigno de un atleta. Ralf Schumacher, por otro lado, no quedó impresionado por la opinión de Marko.
Personalmente no lo habría hecho, pero entiendo lo difícil que es para un piloto que se prepara para su primera carrera de F1 procesar esto en ese momento. Hasta entonces, había tenido una actuación sensacional, tuvo la oportunidad de debutar con un buen resultado, sumando puntos, y entonces sucedió esto. Sintió que había decepcionado a su equipo. Por no mencionar que Red Bull no es precisamente un entorno muy tolerante con los errores... ¿Pero decir que su desesperación y llanto serían vergonzosos? Creo todo lo contrario, esto le puede pasar a cualquiera en estas circunstancias. ¡Es genial ser dueño de tus sentimientos! —Schumacher defendió al joven piloto con deportividad.
¿Qué opinas? ¿Es realmente vergonzoso para un deportista llorar?
Foto: AFP / Planet F1